El equilibrio emocional se logra en orden con tus deseos y realidades
Aceptar el entorno, vivir feliz con ello, impulsar nuestras posibilidades, saber que hay cosas que no dependen de nosotros, etc. En eso consiste el equilibrio emocional, y de ahí, nacen muchas cosas más. Conócelas.
No es aceptar por aceptar la realidad. Es aceptarla en lo más sano posible, con salud metal. La realidad no es estática, debemos fomentar dinamismo diariamente para no colapsar con las pruebas que diariamente surgen que conllevan a una “locura”.
Lograr el equilibrio emocional no consiste en pasos exactos que debes seguir. Más bien trata de desarrollar una capacidad de resiliencia ante un camino quebrado que tiene altos y bajos. De este camino, diariamente se van obteniendo triunfos que pueden ser cotidianos. Asimismo se va escribiendo una historia personal, donde hay éxitos pero también retrocesos y ¿Qué es lo que importa? Pues estar sanos mentalmente ante toda esa serie de sucesos.
¿Ahora entiendes en qué consiste el equilibrio emocional?
El equilibrio emocional se puede perder, pero tu inteligencia te hará recuperarlo y mantenerlo por más tiempo. Puede ser transitoria por cualquier crisis o en algunos casos, definitiva dependiendo de las patologías psíquicas que esa persona posea. Esos casos son depresiones, esquizofrenia y temas similares.
Para aclarar dudas, una persona se encuentra estable y sana mentalmente cuando sabe tener un equilibrio ante el querer tener algo, resolver algo, alcanzar algo que va atado a una realidad propia y personal. Así que no debes pensar que lograr el equilibrio emocional significa no tener problemas porque no es así. Por el contrario, el equilibrio emocional se mide en la actitud y aptitud frente a esas adversidades.
Cuando consideras que una persona tiene estabilidad o equilibrio emocional, es porque sabe afrontar todos los obstáculos e imprevistos que en la vida de cualquier persona puede surgir.
El tener y el ser
El tener, significa el mundo exterior y el ser es el mundo interior. El tener se refiere a adquirir, poseer cosas materiales y grandes, tales como un coche, el chico o la chica más bella, un piso grande, etc. El ser va más dirigido a los valores o sentimientos tanto buenos como malos. ¿Qué pasa con estos sentimientos negativos? Que hay que aprender a dirigirlos o controlarlos para lograr el equilibrio emocional.
Entonces, lograr un equilibrio emocional entre el ser y el tener, es conseguir sintonía y armonía entre esas cosas que normalmente nos consumen la mente. Cuando no lo conseguimos, hay alteraciones en el ánimo que en consecuencia final dejan infelicidad. Equilibrio es una balanza que no debe estar ni más allá ni más acá, sencillamente en el medio. Si nos dejamos llevar por lo externo, es decir, por el tener, acabamos siendo infelices. Si nos dejamos llevar por lo negativo del ser, también acabamos en el sufrimiento. Por ende, debemos procurar una balanza o el equilibrio propiamente dicho.
¿Tener o ser?
¿La felicidad da el dinero?, ¿Si soy sabio, soy feliz?, ¿Si tengo no soy?, ¿Si tengo, soy feliz?, ¿Si soy, estoy feliz? Son estas las preguntas que nos hacemos cuando pensamos del “Tener al ser”. La sociedad e incluso nosotros mismos nos autocalificamos muchas veces. Por ejemplo; si tenemos muchas propiedades, muchos títulos, somos más fuertes y felices. Pero si optamos por desarrollar más valores en capacidad, somos raros y arcaicos.
Lo cierto es que una cosa no influye en lo otro. El detalle está en una valoración propia donde no haya dificultad para dar y recibir cariño. Las propiedades y los títulos no dan la felicidad. La felicidad la obtendrás si estás seguro de quien eres, consciente de todo lo que hiciste para conseguirlo y que con todo eso estés sano. Que te aceptes a ti mismo.
Sentirte seguro por tener muchas cosas es una protección ficticia. Muchos optan por ella cuando están tristes, por adquirir cosas. Sin embargo, estas no son acciones seguras, por lo que cuando fallan, esa persona se siente afectada. Este tipo de personas son conocidas como el adulto neurótico. Es quien piensa que sus inseguridades se neutralizan teniendo.
Su pensamiento es como que mientras más tengan serán más visto y envidiados. Pero se olvidan de ser querido. ¿Dónde se encuentra entonces el equilibrio emocional? En saber tener para posibilitar el desarrollo del ser, es decir, nuestras potencialidades.
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